RITUAL WICCANO PARA BENDECIR EL AGUA
En el Nombre del Dios y de la Diosa
En la religión Wicca se acostumbra a bendecir el agua y la sal en el nombre del Dios y de la Diosa. Esta costumbre se practica antes de celebrar un ritual o festival concreto y forma parte de la liturgia wiccana. Después de bendecir el agua se purifica la estancia con ella para dejar el espacio libre de negatividad. Tanto en los grupos cerrados como en la práctica solitaria, el agua se bendice en primer lugar por esta razón.
La Wicca es una religión que rinde culto especialmente a la Diosa y al Dios en cualquiera de sus nombres. De modo que el agua se bendice en el nombre de los dos para que se convierta en bendita. Si hay algo que me gusta del sistema de bendición wiccano es que al incluir a la Pareja Divina en la bendición, automáticamente comprendo que gracias a la unión de estos principios, la vida es posible.
El Dios en la Wicca representa el Sol, la pasión, la justicia, la protección, la resurrección y el amor. La Diosa por su parte representa la Luna, el amor, la familia, la abundancia y el poder mágico. Cuando bendices el agua en el nombre de los Antiguos Dioses, estas cargando sus moléculas con la energía del Padre y de la Madre. Independientemente de cómo entiendas al Dios y la Diosa, lo cierto es que incluir la energía masculina y femenina en el ritual, ayuda a que el agua capte la energía de la creación a todos los niveles.
Aunque existen muchas versiones para bendecir el agua al estilo Wicca, aquí quiero mostrarte un ritual que practico a menudo.
Tiempo adecuado: Luna Llena
Elementos Necesarios:
Recipiente con Agua
Sal Bendita
Una Varita de Olivo (o del árbol que más te guste)
Pañuelo Blanco
Procedimiento:
1. Llena un recipiente con Agua limpia y ponla sobre el Pentáculo.
2. A continuación relájate y practica “El Ejercicio de Enraizamiento”.
3. Cuando termines el ejercicio toca la campana tres veces para marcar el comienzo del ritual.
4. Toma una cerilla y enciende la vela negra del altar diciendo:
Hágase la Luz en este altar
5. Enciende la vela blanca y di:
Que la Luz sea
6. Enciende la vela roja del Fuego y el incienso (varillo o cono).
7. Relájate y siéntete conectado con el Espíritu.
8. A continuación visualiza una luz blanca brillando sobre el altar y cubriéndote de su energía. Sientes que esta luz desciende sobre ti y te llena de amor. Cuando te sientas realmente conectado, pronuncia unas palabras que te ayuden a expresar tu intención.
Oh Gran Espíritu que otorgas la Vida
Que alimentas nuestro mundo y el mundo invisible
Ilumina mi sendero por la Tierra y por el Cielo
Para que mi alma se conecte a tu Poder
Concédeme tu Bendición oh Sabio Espíritu
Para que pueda servirte a través de los Oficios
Sin Daño alguno y por el Bien común
Que así sea
9. A continuación coloca tus manos sobre el recipiente de sal y recita la siguiente bendición:
Oh Antiguo Dios, Señor de la Luz
Bendice esta sal que presento a tu servicio
Para que se convierta en un instrumento de justicia y sanación
Destierre de su materia la perversidad
Y restaure la pureza original de nuestro ser
Sin daño alguno y por el bien común
Que así sea
10. Visualiza que la sal se llena de luz sagrada. Mantén tus manos unos segundos hasta que sientas que la sal se carga de energía divina.
11. Quita la sal del Pentáculo y pon encima el recipiente con agua. Pon tus manos sobre ella y afirma:
Oh Gran Madre, Diosa de la Tierra
Bendice este agua que presento a tu servicio
Para destierre cualquier enfermedad
Expulse de sí misma cualquier malignidad
Y restaure la armonía entre los mundos
Sin daño alguno y por el bien común
Que así sea
12. Toma tres pizcas de sal y añádelas al agua. Ahora toma la vara de Olivo (o el árbol que hayas escogido) y remueve el agua para que se disuelva la sal.
13. Saca la vara y con tu mano dominante elévala hacia arriba. Con tu mano receptiva sujeta el recipiente con agua. Ahora ve bajando la vara e introdúcela en el agua despacio. Cuando entre dentro del agua, afirma:
Como la Vara es al Dios
El Cáliz es a la Diosa
Y Juntos traen la Bendición
Siente que el Dios y la Diosa se juntan para bendecir el agua. Afirma:
Limpieza y Sanación
Pureza y Redención
Con Luz y Amor Universal
14. Saca la vara y déjala en el altar. Toma el recipiente con agua y elévalo sobre el altar diciendo:
Oh Antiguos Dioses de la Naturaleza
Madre Divina y Antiguo Dios
Aradia, Diana, Selene
Pan, Cernunnos, Lucifer
Bendecid esta agua con vuestro poder
Y otorgadle vuestros dones más sagrados
Que sea salud en nuestros cuerpos
Pureza en nuestras mentes
Y Paz a nuestras almas
Sin daño alguno y por el bien común
Que así sea
15. Deja el recipiente en el altar. Pon tus manos sobre ella y afirma:
Bendita seas por la Diosa
Bendita seas por el Dios
Bendita seas por la Luna
Bendita seas por el Sol
Bendita seas por la Vida
Bendita seas por el Amor
Bendita seas por la Gracia
De la Luz que ofrece sanación
A todos los hijos de la Tierra
Concede Paz, Pureza y Bendición
Bajo la Gracia Divina
Y en Armonía con Todo
Que así sea
16. Toma el pañuelo blanco y cúbrelo con él. Saca el recipiente a la Luna para que se cargue de energía positiva. Puede ser en el balcón, la terraza o el jardín.
17. Acude de nuevo al altar y afirma.
Benditos seáis oh Antiguos Dioses
Que la luz de vuestro amor esté con nosotros
Y que todo sea en paz y protección
Sin daño alguno y por el bien común
Que así sea
18. Apaga las velas y deja consumir el incienso.
El ritual ha terminado.
Al día siguiente el agua estará lista para usar. Si te apetece rociar la casa con ella puedes recitar una oración que acompañe el acto mágico. Por ejemplo:
Oh Antiguos Dioses
Madre Tierra y Padre de la Luz
Que la Paz gobierne nuestro templo
Y que este hogar sea bendito
Con este ritual estás bendiciendo el agua en el nombre de diversos dioses y diosas, pero tú puedes cambiar el nombre de las deidades y añadir las que sientas en tu corazón. Si te has asustado porque he añadido a Lucifer, has de saber que en realidad Lucifer no es más que el conocimiento. Jamás existió un personaje como el diablo y está bien que lo sepas. Según la mitología Lucifer no fue más que la iluminación del ser humano y cuando el hombre tomó consciencia de sí mismo pudo evolucionar y crecer. En la comunidad pagana Lucifer se considera un dios portador de la luz. Cuando lo invocas estás pidiendo iluminación, consciencia, conocimiento, de modo que atrévete a llamarlo y observa si tu evolución se acelera.
Cuando bendecimos el agua en el nombre de un dios y diosa, estamos emparejando su energía para que trabaje a favor de la vida. El agua que ha sido bendecida en el nombre de una pareja divina, aporta salud, amor, protección, abundancia y felicidad. Tiene mucho más poder que el agua bendita en nombre de una sola deidad y me gustaría que lo pruebes para ver cómo te funciona. Si vas a beberla, añade más cantidad de agua para que el sabor de la sal no predomine. Consérvala en un recipiente seguro y úsala en tus rituales diarios.
Resumen: hablar de agua bendita es hablar de vibraciones positivas, elevadas, amorosas y sagradas. A todo el mundo le gusta el agua bendita. No importa si ése agua ha sido bendecida por un sacerdote, por una bruja o por un wiccano consagrado. Si le regalas a tu madre un frasco de agua bendita y le dices que la use, seguro que la acoge de buen grado. Es algo instintivo. Aunque las personas están acostumbradas al agua bendita de las iglesias, lo cierto es que el agua que tú bendices tiene tanto poder como la que prepara cualquier sacerdote. Cuanto antes comprendas esto antes mejorarás tu sistema, pues comprenderás que la clave está en proyectar tu emoción feliz y buena voluntad.
Sabio y Bendito seas
El Brujo Shiva
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