LOS FLUIDOS CONDENSADOS (III Parte)
CÓMO PREPARAR UN FLUIDO CONDENSADO METÁLICO
Acelera la fluidez de tus hechizos
Así como los fluidos minerales son “despensas de energía”, los fluidos metálicos tienen otra ventaja. Y es que son más rápidos a la hora de condensar y disparar la energía hacia el Plano Astral. Teniendo en cuenta que los metales conducen bien la electricidad, puedes imaginarte lo rápidos que pueden llegar a ser a la hora de proyectar la energía en el otro mundo.
Con los metales podemos preparar fluidos condensados para diversos usos. El problema está en que su conductividad, los convierte en ingredientes altamente sensible a las energías. Esto por un lado es muy bueno, porque si estás cargando un mental, quieres que se empape bien de tu intención. Pero también requiere más concentración por tu parte.
Si estás cargando de energía un fluido compuesto por Oro, Plata o Cobre, necesitas estar equilibrado. Esto significa que si durante la semana has estado muy estresado y de repente te pones a cargar el metal, él captará el estrés que llevas en tu Aura. Aprender a controlarse y equilibrarte es necesario antes de cargar los metales de energía. Para esto puedes hacer el “Ejercicio de Enraizamiento” o cualquier otra técnica que te ayude a centrarte.
La tradición ocultista recomienda usar distintos metales para realizar trabajos mágicos. Y los relaciona con los planetas regentes tradicionales. Estos metales y planetas están relacionados de la siguiente forma:
Luna Plata Intuición, sentimientos, videncia, femenino, psiquismo.
Marte Hierro, Defensas, protección, coraje, cortar obsesiones.
Mercurio Mercurio Unión, contratos, vínculos, intranquilizar.[1]
Júpiter Estaño Éxito, poder, fama, expansión, adivinación.
Venus Cobre Amor, energía fluyendo, suerte.
Saturno Plomo Protección, energías densas, magia negra[2].
Sol Oro Poder, victoria, éxito, popularidad, expansión.
Esta correlación entre planetas y metales es clásica, aunque a lo lago de los años se han descubierto nuevos planetas y metales que tienen relación entre sí. El Cobalto por ejemplo se relaciona con Plutón. El Zinc con Urano, y el Bismuto también con Plutón y Neptuno.
Si te apetece probar cosas nuevas, tal vez quieras saber para qué sirven los metales “modernos”:
Acero Protección, corta negatividad, voluntad férrea.
Aluminio Poder mental, psiquismo, videncia, conexión con el más allá.
Antimonio Protección, limpieza, descargas[3].
Bronce Dinero, sanación, protección, suerte, hogar,
Platino Acelerador mágico, conexión con el otro lado, videncia.
Oro Blanco Poder, suerte, prosperidad, con toques más resistentes.
Latón Mover energía, atraer suerte, amor y prosperidad.
A la hora de preparar los fluidos metálicos, puedes optar por comprar el mineral en bruto o en virutas. En algunas tiendas especializadas se venden los minerales en filamentos o granulado para experimentos de laboratorio.
Si vas a comprarlos asegúrate de que sean reales, pues algunas tiendas venden “Polvo de Oro” cuando en realidad es un compuesto químico artificial. Fíjate bien en la etiqueta y asegúrate de que tu proveedor es de confianza. Para comprar el Oro y la Plata yo acudo a las tiendas de minerales especializadas. Normalmente se venden en láminas embasadas en botellitas con alcohol como conservante. Este Oro y Plata es laminado, pero sirve perfecto para preparar los fluidos.
Si estás pensando que puedes usar un objeto de Oro o Plata tal cual (sin limar), tienes razón. Se puede usar cualquier objeto del metal necesario para preparar el fluido –sin necesidad de usar la viruta-. Muchas veces he cargado una cadena de Plata con energía durante 7 días seguidos y luego la he usado para empoderar cualquier hechizo femenino, psíquico o de hogar. Cargar una cadena de Plata u Oro con energía y luego usarla como fluido, es una idea genial para empoderar hechizos que requieran su poder. La Plata ayuda a conectar con el inconsciente y el más allá. También potencia la intuición, de modo que dos o tres eslabones, son más que suficientes para empoderar el hechizo.
Con el Oro sucede lo mismo. Puedes cargar una cadena de Oro con energía poderosa y luego usar uno o dos eslabones para añadirlos a la fórmula.
¡Ohhh…..! ¿Cómo voy a usar el Oro en mis rituales?
¡Es algo muy caro como para gastarlo!
Bueno, todo depende de lo que quieras lograr.
Si estás dispuesto a lograr tus objetivos, necesitas invertir energía en tu magia.
Invertir en material no es un problema cuando estás decidido a triunfar.
Igual que una vez al año cargo el polvo de Mármol para empoderar mis velones de fortuna, también cargo una cadena fina de Oro que reservo únicamente para hechizos de éxito. Una cadena de Oro fina, puede costar entre cien y doscientos euros. Y un solo eslabón es suficiente para empoderar un amuleto, ritual o hechizo. Si divides los eslabones que lleva por el precio total que te costó, verás que cada eslabón te sale a renta.
-¿Brujo qué haces?
Estoy preparando Oro para mis rituales
-¡Preparando Oro! ¿Qué diablos es eso?
Es cargar el Oro con la técnica de la matriz cuántica. Cuando cargas el Oro con sentimientos de fortuna, ésa energía se queda impregnada en él ¡para siempre! Y luego esa energía puedes usarla en tus hechizos. Es como guardar la energía en el metal y luego usarla cuando la necesitas.
Sabiendo que el Oro es el metal de la fortuna ¿porqué no usarlo en los fluidos? A mí me encanta cargar Oro de energía porque me obliga a sentirme poderoso y triunfante. Si te sientes pobre como para invertir en una cadena de Oro, piensa que ése sentimiento no ayuda. Necesitas aceptar la fortuna en ti para que la carga emocional funcione.
Te diré, que cuando hice esto por primera vez, me sentí muy extraño y confuso. En ése momento yo no sabía si tendría éxito mi carga, y tenía dudas de si estaba malgastando una pieza de joyería. Para sentirme mejor, reprogramé mi mente con la ideal del éxito y generé emociones de merecimiento, suerte y abundancia. Al hacerlo, me di cuenta de que cargar Oro, exigía esas emociones positivas y prósperas, pues si no las generaba en mi interior, la matriz astral del metal no se inmutaría. Fue aceptar la prosperidad a nivel interno y darme cuenta de que el Oro era perfecto para mantener la energía, atraer a los espíritus y lograr la suerte.
Lo mismo se puede decir de los metales más económicos. Si optas por el Cobre, el Hierro o el Aluminio, no caigas en el error de pensar que son menos poderosos. Cada metal sirve para lo suyo, y tú has de cargarlo como el mismo sistema de emociones intensas.
Si cargas virutas de Hierro para protección, comprobarás que el Hierro es el mejor metal para defender tu territorio. Aunque parezca un metal poco valorado, en realidad es el mejor protector que tenemos. Es capaz de frenar ataques oscuros, espíritus malvados y maleficios. En el Plano Astral el Hierro cargado, se ve como una espada de gran poder protector. Cuando está bien cargado es capaz de alejar todo tipo de seres extraños, desde espíritus, hasta larvas astrales.
En la antigua tradición celta el Hierro estuvo relacionado con la diosa del fuego Brighith. Esta diosa tiene un punto guerrero, poderoso y fuerte. Como el Hierro sale de la Madre Tierra y se usa para defender al poblado, enseguida se estableció un vínculo mágico entre el metal y la Diosa.
Si visitas una herrería antigua y ves como trabajan los herreros dando golpes al Hierro sobre el yunque, tal vez sientas que el ambiente es poderoso a nivel psíquico. En estos ambientes la negatividad no tiene lugar, porque la presencia del Hierro en constante movimiento, aleja a los espíritus oscuros.
Las tradiciones mágicas de América latina también usan el Hierro como elemento protector. Para eso cargan un clavo grande de Hierro como amuleto. Si quieres hacer esto has de buscar un clavo de ferrocarril usado y cargarlo de energía. Luego, ése clavo grande se coloca en el altar, cerca de la puerta de entrada o en el negocio. Mientras el clavo está ahí, la protección se mantiene, pues al ser de Hierro, actúa como defensor personal.
Trabajar con los metales a nivel energético, te hacer ver el poder real que tiene cada uno. Y si los cargas de emoción, tienes una despensa mágica de lo más completa.
Imagina que quieres ayudar a una persona a proteger su coche en sus viajes. Tú sabes del poder mágico del Hierro de modo que para ayudarle vas a cargar un clavo de energía protectora. Durante siete días seguidos realizas la carga y una vez terminado se lo entregas a la persona como protección. El clavo puede llevarlo en un saquito de tela y guardarlo en la guantera del vehículo. También puede llevarlo encima (si no es muy grande) o ponerlo donde sienta necesidad de resguardo. Si la carga la has hecho bien, ése clavo y su matriz cuántica estará impregnada de tus buenos sentimientos y protegerá a tu amigo.
Usar los metales da muchas opciones. Imagina que deseas ayudar a tu marido a mejorar su situación económica. Has pensado en prepararle un velón rebozado con polvos “Buena Suerte” para que su vida cambie. Sabiendo el poder que tienen los metales, vas a añadir un fluido metálico para acelerar el efecto. De entre todos los metales has escogido el Cobre, pues quieres acelerar la energía positiva. Durante siete días cargas el metal con la técnica de la matriz. Y una vez cargado tomas un trozo de hilo y lo enrollas alrededor del velón. Para sostenerlo en la cera lo cruzas como si hicieras una trenza y ves que queda perfecto. Enciendes el velón, rezas tus oraciones y visualizas el éxito con total alegría.
¿Qué hará el Cobre unido al velón?
El hilo (sin plástico, obviamente), acelerará el poder de las hierbas y el fuego. La energía que tú le incluiste al metal, colaborará con el hechizo aportando fluidez. Y cuando enciendas ése velón, la energía saldrá disparada en busca de ayuda. Si te concentras bien ante el fuego y visualizas a tu marido feliz, el hechizo funcionará porque en un mismo ritual has unido hierbas, fuego, metal y tu propia energía positiva. Luego, el Cobre que quede, puedes recogerlo, limpiarlo de cera y dárselo a él para que lo lleve en la cartera como amuleto de suerte.
Los fluidos condensados metálicos (igual que los demás) son potenciadores mágicos.
Si te cuenta encontrar ideas ingeniosas para usarlos, aquí tienes algunas:
ü Añadirlos a los amuletos de saquito.
ü Ponerlos debajo de tus velones para empoderar el efecto.
ü Ponerlos alrededor del velón (hilos o filamentos).
ü Añadirlos alrededor de la mecha para que se quemen y suelten su energía.
ü Atarlos alrededor de un palo y hacer un bastón de poder abre caminos.
ü Atarlos alrededor de tu dedo para que te dé energía o protección.
ü Quemarlos en un carboncillo con un sahumerio concreto[4].
ü Añadirlos a tus polvos mágicos (si son en virutas) y rociarlos.
ü Usarlos para atar botellas mágicas con trabajos o productos concretos.
ü Usarlos para sellar rituales y encerrar la negatividad que te daña.
ü Añadirlos a frascos de polvos, aceites o sahumerios como potenciadores.
ü Añadirlos a medallas, camafeos, colgantes con hueco y formar un amuleto o talismán.
ü Añadirlos a las aguas floridas para darles energía extra.
ü Añadirlos a tus “Botellas de Bruja” para empoderarlas.
ü Usarlos para preparar lociones poderosas, de suerte o amor.
ü Añadirlos a sales mágicas (cómo la famosa Sal Negra) u otros derivados.
ü Incrustarlos en velones (si el metal es en láminas) para acelerar el efecto.
ü Añadir unas pizcas a tus velones de bruja y enrollar la cera con el metal dentro.
La magia con metales da muchas opciones, tantas como puedas imaginar.
Si cargas un velón con hierbas psíquicas y le añades una trenza de hilo de Plata, entonces ése velón va a funcionar mejor, porque la Plata favorece la comunicación con tu “Yo Sabio”. Y si cargas una bobina de Hierro, Cobre, Aluminio, Acero, o cualquier metal con la intención correcta, podrás usarlo para empoderar tus hechizos.
Cuando leí el libro “Guía Práctica de la Magia” de J.L. Caradeau y C. Donner, aprendí que el hilo de Plomo se usaba para “atar” la negatividad del Bajo Astral. Para hacer esto, debes poner un plato de sal bendita debajo de tu cama durante 7 días seguidos. Luego, ésa sal debes meterla en un bote de cristal hermético y atar alrededor un hilo de Plomo dándole varias vueltas. La idea es que la sal ha recogido tu negatividad. Y una vez puesta en el bote, has de atarla con hilo de Plomo para que no salga de ahí ni perjudique a nadie. Luego, ese bote se ha de enterrar en el campo donde nadie lo encuentre. La idea es que mientras la sal esté ahí, ésa negatividad no volverá a dañarte.
Los autores también recomiendan usar hilo de Plomo (del que venden para que pesen las cortinas) como amuleto protector. Si quieres hacer esto, carga el hilo durante siete días seguidos y tendrás una protección genial contra la magia negra. Aunque tú no saques el hilo de la tela que lo protege, si haces la carga correctamente el metal captará tu energía. Una vez cargado ponte el hilo como pulsera y llévala contigo hasta que sienas que “pesa” más de lo normal o te molesta. Cuando ocurra esto, quema la pulsera en una hoguera o entiérrala en el campo.
Nota: los metales “blandos” como el Plomo y el Estaño se funden rápidamente ante el calor de las velas. De modo que no has de usarlos en velas ni sahumerios. Es mucho más sano usarlos como amuletos, saquitos, trabajos de arcilla, etc, que quemarlos en casa.
Si estás pensando que hacer esto es muy difícil, en realidad no lo es tanto.
Todos los metales conducen bien la energía, de modo que puedes cargarlos de poder.
Sea en forma de virutas, hilos, placas o trocitos sin forma, puedes aprovecharlos y usarlos.
El sistema de carga es el mismo en todos los casos:
1. Escoges el metal que necesitas.
2. Lo cargas de energía durante siente días.
3. Luego lo usas en tu magia.
Si quieres proteger tus metales mágicos (una vez cargados), consérvalos en cajitas, botellas o frascos aparte. No los dejes en la caja de herramientas ni en el trastero, pues podrían acabar en la basura. Yo guardo los metales cargados en botellines igual que si fueran hierbas o en saquitos de tela. Los etiqueto con la fecha de carga y el nombre para recordar lo que son.
Desde la Experiencia: si leyendo esta lección tienes dudas sobre el poder mágico de los metales, déjame conectarte un detalle curioso. Hace cuatro años me encontraba navegando por Internet en un grupo de Facebook. Observando los restos de las velas que había puesto una amiga, me fije en que ella puso un velón para tener suerte sobre una hoja de papel de Aluminio.
Aunque ella puso el velón para abrir caminos y mejorar su vida, al mirar la hoja del papel, me di cuenta que en el Aluminio se veía reflejado el rostro de un señor con un problema en la cabeza. Para asegurarme bien descargué la foto, la giré varias veces y efectivamente el Aluminio mostraba el rostro.
En privado, le envíe un mensaje preguntándole si tenía alguien cercano que hubiera muerto de algo en la cabeza -como un derrame o ictus-. Yo veía el rostro con alguna sombra en la frente y lo asocié a un problema de cabeza. A los pocos minutos me contestó, y me dijo que efectivamente hacía menos de un mes, que murió un familiar de un ictus.
-¿Cómo lo sabes?
Bueno, en realidad lo acabo de ver en el papel de Aluminio. Que esté ahí (con esa sombra en la cabeza) indica que ése espíritu no ha superado su dolor, y se está revelando a través del Aluminio. El Aluminio -al ser un metal que trabaja bien con las visiones y espíritus-, tiene la capacidad de mostrar los espíritus que te rondan. Que salga en él, indica que ése espíritu y tú, tenéis cierta afinidad. Tal vez necesite ayuda o sienta que tú puedes guiarle para ser más feliz en el otro lado.
Teniendo en cuenta que los espíritus son energías bioeléctromagnéticas, es normal que el metal los refleje. Que reflejara el rostro de ése familiar, indicaba que el espíritu todavía estaba por ahí, cerca de ella, y él sabía que de alguna manera ella haría de mensajera para darse a conocer. Al verlo le recomendé una oración para ayudar al difunto y encontrar la paz.
Este ejemplo me demostró (una vez más) que lo que cuenta la tradición ocultista es cierto.
Los metales son altos catalizadores energéticos. Cuando los cargas de intención, su estructura molecular cambia. De la misma forma que un espíritu puede modular las ondas que componen la materia, nosotros también podemos hacerlo y aprovechar su materia para potenciar nuestra magia. Aunque parezca que los metales están asociados a la mecánica, electricidad y cosas modernas, en realidad son aliados mágicos magníficos. Ellos son hijos de la Tierra, con altas capacidades energéticas.
¿Porqué no aprovecharlos?
MEZCLAR VARIOS METALES CARGADOS
Si después de usar fluidos metálicos simples te apetece mezclarlos para preparar un fluido metálico compuesto, guíate por la energía que te aporta cada metal. Un fluido compuesto por varios metales aporta mucha energía. Si vas a hacerlo sigue el mismo sistema de carga. Impregna cada metal uno por uno y luego mezcla la energía en el torbellino de luz.
Una mezcla sencilla de amor puede llevar:
Cobre Amor, energía fluyendo, suerte.
Plata Energía femenina, sentimientos.
Bronce Hogar, suerte, prosperidad.
Esta mezcla es bastante efectiva y potencia los hechizos de armonía. Puedes rociar unas pizcas en los velones, saquitos o rituales de petición. Si conseguiste los metales en hilos, puedes hacer una trenza con ellos (anillo o pulsera) y añadirla a tu ritual. También puedes llevarla en el bolsillo o ponerla en la entrada de casa como decoración. El hilo de Plata se vende en tiendas de fornitura y manualidades. No es caro y una bobina da para mucho.
Otra mezcla que puedes usar para atraer la suerte a nivel general, es:
Oro Poder, victoria, éxito, popularidad, expansión.
Bronce Dinero, sanación, protección, suerte, hogar,
Cobre Amor, energía fluyendo, suerte.
Si el Oro que vas a usar es un eslabón, el bronce un trocito de algo y el cobre un hilo, puedes ponerlo todo en un saquito con hierbas mágicas para que los metales empoderen el efecto. Da igual que el formato metálico sea polvo, viruta, hilos o con cualquier otra forma. Siempre que los hayas cargado de energía, funcionará.
¿Y qué tal si preparamos una mezcla de alta protección?
Hierro Defensas
Acero Fortaleza
Antimonio Limpieza
Esta mezcla es ideal para frenar ataques psíquicos, Espíritus Oscuros, Larvas Astrales y otras maldades. Puedes preparar un bote de la mezcla y reservarla para tus rituales de limpieza y exorcismo. Puedes ponerla dentro de una bolsita de tela y guardarla al lado de la mesita de noche para proteger tus sueños.
Atención: teniendo en cuenta que el Antimonio es tóxico cuando lo quemas, no has de usar esta mezcla en velones ni sahumerios. Resérvala para otros sistemas. Puedes añadirla a tus platos de arcilla, polvos para rociar, formar círculos o símbolos con la mezcla.
Una mezcla psíquica que ayuda a mejorar tu conexión con el “Yo Sabio” y despierta tus poderes es:
Plata Intuición, conexión oculta
Aluminio Poder Mental
Cobre Fluctuación energética
A la hora de usarla puedes tomar el Aluminio de la cocina y formar un sobrecito con él para guardar dentro los demás metales y añadir hierbas, minerales u otros elementos de poder. Si lo que te gusta son las artes manuales, puedes preparar esta mezcla en viruta y añadirla al “Ojo de la Tierra para mejorar tu Psiquismo”.
¿Te parecía muy difícil preparar y usar fluidos metálicos?
Como ves es bastante sencillo.
MEZCLAR METALES, MINERALES Y HIERBAS
Teniendo en cuenta la cantidad de ingredientes disponibles, te habrás dado cuenta que las combinaciones son infinitas. También puedes preparar un fluido condensado que incluya metales, piedras, hierbas y otros ingredientes afines. Si combinas bien los productos que escojas, el resultado puede ser formidable.
Imagina que quieres atraer el amor a tu vida. Revisando las mezclas herbales que has aprendido, has escogido la mezcla de “Amor Salvaje”. Quieres atraer el amor y tienes las hierbas en tu poder, de modo que pasas a la acción.
Ahora quieres potenciar la mezcla. Para hacerlo has pensado que puedes incluir polvo de Esmeralda, polvo de cuerno de Ciervo y una pizca de Hierro en polvo. Has preparado todos los elementos en tu plato de conjuros y ahora vas a cargar los ingredientes de energía.
¿Qué obtendrás?
El resultado es una mezcla olorosa de hierbas, piedras y metales cargada de poder.
Teniendo en cuenta los ingredientes que lleva, esta mezcla sirve para atraer el amor, superar la timidez, mejorar tus relaciones íntimas, ligar y alejar oponentes amorosos. Al incluir un toque de Hierro, la mezcla es altamente efectiva para dejar atrás los miedos.
A la hora de usarla puedes rociarla sobre en una vela, velón, sahumerio, saquito o hechizo de petición. Teniendo en cuenta que todos los ingredientes son atrayentes, ¿te imaginas el poder que tiene? Si la mezcla la has cargado correctamente, tendrás un poderoso ingrediente mágico.
Puede que te preguntes ¿Hierro para el amor?
Sí, una pizca de Hierro ayuda a cortar la timidez y pasar a la acción. Si eres una persona muy “echada para adelante” entonces no lo necesitas. Pero si te cuesta relacionarte sí.
Resumen: los fluidos condensados metálicos son elementos de poder. Una vez tienes el metal en tus manos, te das cuenta de que no existen límites Si quieres cargarlos de energía determina tu intención, afina tus emociones y ponte en marcha. La matriz cuántica de los metales es altamente sensitiva a lo que sientes. Y si la cargas de emociones intensas el resultado será poderoso.
Si quieres aprender más sobre el poder mágico de los metales, te recomiendo la obra de Scott Cunningham “Enciclopedia de Cristales, Gemas y Metales Mágicos”. Encontrarás muchas fórmulas interesantes y te dará más ideas prácticas.
LA MAGIA POPULAR DE LOS METALES
La cultura popular está llena de rituales y fórmulas que incluyen metales con fines mágicos. Si eres aficionado a la lectura de libros y foros de esoterismo, encontrarás fórmulas donde se incluyen metales como elementos de poder. Y si estos metales los cargas de energía, entonces los rituales funcionan.
Para que puedas experimentar con metales simples, aquí tienes varias recetas que he probado con éxito:
La Raíz de Cúrcuma con Cobre. Se toma una raíz de Cúrcuma y un hilo de Cobre. Se enrolla el hilo alrededor de la raíz mientras se piensa en lo deseado. Ahora se pone en tu altar o plato de conjuros y se carga de energía durante siete días seguidos. Si esto lo haces bien (concentrado, sintiendo lo deseado, etc), entonces ésa raíz y Cobre, es un amuleto de buena suerte. Se puede llevar en el bolsillo, conservarlo junto al dinero o ponerlo en la caja registradora –si tienes un comercio-. Si esto lo haces bien, verás que la raíz va cambiando y muestra los rostros de los Espíritus Colaboradores en ella. Cuando los rostros aparecen, entonces tienes la ayuda ahí. Este sistema puedes prepararlo para ayudar a los demás a que favorezcan la suerte. Es sencillo, pero sin duda funciona.
La Raíz de Mandrágora con Plata o láminas de Oro. Se toma una raíz de Mandrágora y siguiendo el mismo proceso se enrolla la Plata alrededor. Si vas usar láminas de Oro, se incrustan en ella de modo que se queden pegadas. Para pegarlas puedes usar cola de manualidades o pegamento de barra. Una vez listo, se carga la raíz durante siete días seguidos con la intención de atraer prosperidad (o eso que tanto deseas). Al combinar la raíz y el metal, estamos creando un fluido condensado vegetal y mineral de lo más intenso. La raíz puede llevarse en una bolsita de tela roja para evitar que se dañe. También se puede conservar en el negocio o en tu rincón especial.
La Manzana con Cobre. Otra fórmula que encontré y que funciona perfectamente, consiste en tomar una Manzana y enrollarle un hilo de Cobre alrededor. Se ata el hilo como si fuera un cinturón (dándole varias vueltas). El Cobre no ha de romper la Manzana, tan sólo sujetarlo. Para esto puedes darle varias vueltas a la fruta, tanto en vertical como horizontal. Una vez atado el Cobre, se carga la Manzana para que te ayude a lograr lo que deseas. Teniendo en cuenta que el Cobre y la Manzana son muy versátiles en magia, puedes usar este sistema para tener suerte, superar entrevistas, aprobar exámenes, protección y viajes. Una vez cargada de energía, la Manzana se deja en el altar (sobre un plato) o encima de un mueble para que siga trabajando. Ya no se ha de tocar para que la carga inicial que le diste sigua operando. Si la Manzana se seca, se conserva. Si se pudre, se tira todo a la basura.
El Limón con Hierro. Si lo que quieres es crear un amuleto protector del mal, toma un Limón fresco y grande y clava en él cinco clavos de Hierro (de unos 3 cm). Ponlos de modo que no se toquen unos con otros. Ahora pon el Limón sobre tu plato de conjuros y cárgalo de energía -durante siete días seguidos-. Enfoca la energía en protección, suerte, bienestar, alegría, etc. Una vez cargado, ponlo donde necesites su influencia. Si el limón se va secando, todo va bien. Si se pudre, deséchalo a la basura y prepara otro (recogió negatividad). Esta técnica es fantástica porque el Limón (al llevar ácido) recoge la negatividad que el Hierro pueda detectar.
La Raíz de Lirio con Plata. Para activar tu psiquismo y mejorar tus cualidades de videncia, toma una raíz de Lirio y enróllale un hilo fino de Plata. Ahora cárgalo de energía durante siete días seguidos y llévalo contigo como amuleto de videncia. Puedes ponerlo en un saquito de tela y guardarlo en tu caja de Tarot o llevarlo encima. Sabiendo que la raíz de Lirio ayuda a despertar la psique, te imaginarás lo potente que puede ser cuando está bien cargado. Si esto lo haces con cariño, verás que la raíz cambia con el tiempo y parece como si tuviera vida. En realidad, es la matriz cuántica que está cambiando gracias a tu intención y Espíritus Colaboradores.
Nota: si observas que la Plata se pone negra, no busques negatividad. La Plata brillante se oscurece por estar expuesta al sulfuro de hidrógeno del aire. Esta capa negra, en realidad funciona como protección conservando la Plata pura debajo de la superficie. Que se oscurezca no anula el trabajo mágico ni anuncia nada malo.
El Nabo que aleja el mal. Si lo que quieres es alejar enfermedades, mala suerte y ruinas, puedes tomar un Nabo grande y vaciarlo por dentro. Ahora escribe en un papel lo que quieres alejar y colócalo en su interior. Añade una cucharadita de sal, limadura de Hierro y trocitos de Plomo. Cierra el Nabo con la parte que has quitado y cárgalo de energía durante siete días seguidos. Concéntrate en la idea y siente que te liberaste del mal. Cuando pase la semana, toma una vela morada y enciéndela. Ve derramando cera sobre el tubérculo para que se selle todo y no salga nada. Ahora envuelve el Nabo en tela negra y entiérralo en el campo. Si esto lo haces una vez al año, colaborarás con tu suerte y alejarás males y desgracias.
A poco que busquemos en libros, foros y chats de brujas encontramos información interesante para aplicar. La cultura popular está llena de datos mágicos interesantes y si los analizas verás que pueden ayudarnos mucho.
Una vez le oí decir a una señora, que ella llevaba una cadera de Oro maciza para tener suerte y prosperidad. Hablando con ella le pregunté porqué lo hacía. Ella, que tenía un punto esotérico gitano, me dijo que el Oro era un metal mágico, lleno de poder. Cuando la señora quería lograr una petición, se quitaba la cadena, la ponía formando un círculo en su altar religioso y en medio ponía una vela. El Oro, obviamente estaba cargado de su energía porque ella había concentrado en él todo su poder. Cada vez que usaba la cadena para lograr algo, movía energías. Y sin saberlo hacia magia poderosa. Cuando el velón se consumía, se ponía la cadena como amuelo de buena suerte. Tengo que decir que esta mujer tuvo mucha suerte en su vida y jamás sufrió percance alguno.
¿Curioso verdad?
Sabio y Bendito seas
El Brujo Shiva
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[1] El Mercurio es altamente tóxico y peligroso. Por vía interna provoca la muerte y su manejo también resulta toxico. Por esta razón el Ministerio de Sanidad y Consumo lo retiró del mercado. Actualmente sólo puede encontrarse en tiendas de minerales o colecciones. Si vas a usarlo evita llevar anillos de Oro y guárdalo bajo llave. Jamás lo tires al agua porque contaminarías el medio ambiente. Si te parece complicado encontrarlo, recurre a los antiguos termómetros de cristal. En esta lista lo he incluido porque forma parte de la tradición ocultista, pero sé muy prudente con él.
[2] El Plomo se usó en la antigua Grecia para maldecir a las personas. Los restos arqueológicos así lo atestiguan con sus famosas “tablillas de embrujamiento”. Teniendo en cuenta que este metal es tóxico y está asociado al dios del inframundo, los griegos lo usaron para escribir en él la maldición y luego arrojarla al fuego. Por Ley de Contigüidad y Semejanza, lo usaron para que del mismo modo que se derretía el metal, así le sucediera a la persona. Nosotros obviamente no queremos usarlo de esta forma, pero está bien que sepas cómo lo usaron en la antigüedad.
[3] El Antimonio es tóxico por vía interna y cutánea, de modo que has de manejarlo con cuidado. No lo mezcles con Halógenos como pueden ser el Cloro, Bromo, Flúor, etc. Tampoco con ácidos fuertes como el ácido clorhídrico, nítrico o sulfúrico. Si lo mezclas con estos agentes podría reaccionar de forma violenta y explosiva.
[4] No todos los minerales se pueden quemar con seguridad. El Plomo y el Estaño se derriten con el fuego de las velas y el Antimonio no es sano para la salud. De modo que te aconsejo evitar estos metales en tus velas. Si necesitas usar el Plomo o el Estaño en tu magia, puedes añadirlos en saquitos de protección y llevarlos como resguardos. No siempre hemos de usar velas para liberar la energía, de modo que recuerda este dato.