LA MEDITACIÓN VEGETAL
Aprende a comunicarte con el Ánima de las Plantas
Cuando estudiamos libros de Botánica Oculta leemos que el Romero es bueno para la suerte y la Canela para el amor. Descubrimos que la Pimienta protege y el Jazmín nos bendice. También sabemos que el Roble da fuerza y el Pino nos conecta a los espíritus elevados.
Normalmente esto lo aprendemos en los libros que han escrito los expertos en la materia, y la información nos sirve como guía. Nos ayuda a empezar y nos da una base a seguir. Pero si quieres ser un brujo herbal de verdad, necesitas descubrir los poderes de las hierbas por ti mismo.
No hay mejor cosa en el arte herbal que experimentar para descubrir detalles alucinantes.
Para que puedas comunicarte con el ánima de las plantas –y árboles- te recomiendo practicar una meditación directa.
1. Haz el “Ejercicio de Enraizamiento” y equilíbrate.
2. Siéntate y coloca en tus piernas un paño o mantel.
3. Toma ahora una porción de la planta y colócala sobre tus piernas o en tu altar.
4. Toca la planta, huélela y percibe su energía.
5. Ahora dirígete hacia su ánima y pídele permiso para conectar con ella. Si quieres puedes usar palabras de poder:
Amado Té de Roca
Pido permiso para entrar en tu Templo
Ayúdame a conocer tu espíritu
6. Cierra los ojos y siente que te introduces en la planta. Imagina que tu consciencia se vuelve verde y entra en ella por los tallos, ramas, flores o la puerta que mejor te parezca. Imagina que eres tan diminuto que tu consciencia es capaz de entrar en su interior.
7. Siente la savia que todavía está en ella. Percibe las fibras que forman las hojas y sus moléculas. Siente que la planta está viva.
8. Desplaza tu consciencia por el cuerpo de la planta. Siente sus raíces, tallo, hojas, flores, semillas. Déjate ser la misma planta sin juzgarla ni interpretarla. Simplemente sé la planta. Reconoce su antigüedad y evolución, y siente que ésa planta está aquí desde hace miles de años.
9. Ahora da un paso más y preséntate a ella. Mentalmente dile tu nombre y pregúntale si tiene algún mensaje para ti. En este momento la meditación puede cobrar vida y notar o sentir un mensaje inesperado. No adoptes ninguna postura, simplemente observa y escucha lo que te cuenta.
10. Cuando sientas que la comunicación ha terminado, dale las gracias por su ayuda y sal de ella. Vuelve a tu estado de consciencia humana y da por terminado el ejercicio.
Con esta meditación puedes descubrir las cualidades mágicas de las plantas. Puedes enterarte de sus secretos ancestrales y aplicarlos en tus fórmulas. La clave del éxito está en no forzar la comunicación. Si dejas que tu “Yo Sabio” te traiga la información que él capta del ánima vegetal, la información te llegará.
De la misma forma que para aprender Tarot necesitas leer, aprender y luego dejar que cada carta te hable para ver qué te cuenta, con las hierbas sucede lo mismo. Además de consultar libros y enciclopedias especializadas, debemos escuchar lo que la planta nos dice. Puede que la información que te da, sea ocasional o para el momento, pero aprender a comunicarte con ellas te permitirá adquirir más sabiduría.
Cuando ves a un vidente usar un sistema adivinatorio, te das cuenta de que dice cosas que no están en las cartas. Da información precisa como nombres, letras o fechas. Esto no lo aprende el vidente en su “formación empírica”, sino a través de su comunicación mental con los planos superiores.
Lo mismo ocurre con las plantas. Si aprendes a escucharlas, ellas te darán información confidencial. Y esta información te pondrá en las filas delanteras de la magia herbal. Puede que luego, al consultar los libros descubras que la información coincida o añadas más datos a tu conocimiento mágico.
Muchas brujas expertas practican esta meditación para aumentar su conocimiento. Si tú lo haces también podrás conectar con el ánima y descubrir sus poderes. No hay ningún secreto extraño detrás de esta comunicación. La clave está en concederte el tiempo suficiente y tener paciencia para escuchar.
He comprobado que cuando no fuerzo la meditación, la comunicación con las plantas fluye.
No tienes que perder la consciencia para lograrlo. Tampoco necesitas drogarte para que la comunicación se produzca. Todo lo que necesitas es conectarte al ánima vegetal y escuchar
Captar información exclusiva a través de la propia planta es una maravilla. Te ayuda a descubrir cosas que no has estudiado, igual que cuando desarrollas tu mediumnidad. Cuando practiqué esta meditación con la Ruda, descubrí una técnica muy efectiva para detectar espíritus anclados en el Aura. Aunque ya sabía que la Ruda era una planta “purificadora”, quería probar el ejercicio para ver si ella misma me chivaba algún dato más. En la meditación usé Ruda seca, puesta sobre el paño de tela. Seguí todos los pasos y descubrí que la Ruda no sólo era buena para quitar negatividad, sino que además te avisaba de las presencias incluso estando seca.
Si tomas un puñadito de Ruda seca y troceada (como la que venden en las tiendas), y la tocas en tus manos unos minutos, la planta se impregnará de lo que lleves anclado en tu Aura. Para saberlo debes echar el puñado en un bol con agua a temperatura ambiente. Una vez echas la planta, ella empieza a moverse en el agua. Se agrupa y forma la cara de los espíritus que llevas.
¿En serio?
Sí. Incluso estando secada, la Ruda hace esto. Al tocarla, recoge tu energía y el agua le permite moverse para formar la imagen. Cuando miras el recipiente a través de tu teléfono móvil, ves el rostro mucho mejor. Esos rostros son espíritus y la Ruda te los muestra para que tomes consciencia de su presencia. Ésa agua puedes usarla después para fregar el suelo, añadirla a la bañera o rociarte a ti mismo.
Si tienes a tu alcance las hierbas ¿porqué no comunicarte con ellas de forma directa?
Tradicionalmente se sabe que la Ruda es una planta limpiadora. Es cierto. Pero lo que no se sabe, es que es una planta tremendamente fiel. Su poder nos ayuda a “liberarnos de las ataduras autoimpuestas”, “autotraiciones” y “pactos inconscientes creados”. Si sientes que has vendido tus ideales, usa la Ruda para volver a ti mismo. Conéctate con ella y recupera la esencia libre de tu alma. Para ser feliz no necesitas vender tu alma a nadie. Lo único que necesitas es conectarte a tu potencial y desarrollarlo. Yo tengo raíces de Ruda puestas en el altar para recordar esta idea. Las recogí del monte con el ritual de recolecta y funciona.
Hablar con el ánima de las plantas te ayuda a resolver dudas. En el año 2017 hice esta meditación con raíz de Jengibre. El Jengibre es una raíz con muchos poderes medicinales y mágicos. Ya lo había usado con éxito en fórmulas de dinero y amor -años atrás-. Sin embargo leí que era una raíz peligrosa (?). Al ver esta información me quedé pensativo, y no sé porqué, me hizo dudar.
Para salir de dudas probé varias fórmulas, velas y sahumerios. La mezclé con otros productos para ver qué reacción tenía en la magia. Al final, hice “La Meditación Vegetal” y se lo pregunté directamente.
¿Pero vamos a ver, qué pasa contigo?
¿Eres buena o mala realmente?
La respuesta fue que el ánima del Jengibre no es buena ni mala. Simplemente es, de acuerdo a su Naturaleza. Es cierto que el Jengibre tiene mucho “poder activador de las energías”, y esto la convierte en un potenciador innato.
El Jengibre se utiliza para potenciar cualquier fórmula atrayente. Ya sea dinero, amor, sexo, suerte o amigos. Al ser una raíz, “agarra” y trae al Plano Físico lo que en ella se programe -haciendo que el deseo se cumpla más rápido-. Pero no es bueno ni malo. Si lo mezclas con Canela y Laurel, tienes una fórmula perfecta para caer bien a la gente y mejorar tus citas. Si lo mezclas con Hierbabuena y Pimienta de Jamaica elimina obstáculos laborales -haciendo que tus compañeros te traten mejor-.
El Jengibre también sirve para “digerir las vivencias” y esto se puede aplicar a cualquier caso. Si lo añades una fórmula de dinero, potenciará el efecto. Le dará su toque picante y fogoso, pero la ética la pones tú. Si te apetece añadirlo a una fórmula de atracción sexual, él aumentará la energía, pero la moral que te guíe es cosa tuya.
Las plantas no tienen la misma moral que nosotros. Ellas son mucho más serias y auténticas. No se limitan a normas aceptadas por la sociedad. Simplemente son.
Cuando terminé la meditación, le pedí perdón al Jengibre por creer cosas raras y continué usándolo en mi magia. Ahora lo uso cuando lo necesito, pues sé que su poder es real.
Te diré, que también he meditado con hierbas venenosas como el Eléboro Blanco.
El Eléboro es una planta de origen centroeuropeo. Sus principios activos bajan la tensión hasta el punto en que puede provocar el infarto. Esto físicamente no es bueno, pero mágicamente sí. Cuando medité con él, me di cuenta de que su poder era precioso para defender tu territorio. El Eléboro es una de ésas plantas maravillosas perfectas para lo suyo. Si sabes usarlo bien, te ayuda a detener ataques oscuros. Actúa como un desagüe energético para evacuar la basura astral que te envían. Saber que existen plantas así te ayuda mucho. Sobre todo cuando te dedicas abiertamente a la magia y necesitas limpiar el ambiente de vez en cuando.
Cuando conjuraras el ánima del Eléboro puedes usarlo para “frenar conspiraciones”, “detener ataques psíquicos y “anular la maldad”. En los planos astrales actúa como un policía anti disturbios. Baja la negatividad y la anula, evitando que te alcance. Si encima lo mezclas con otras plantas fuertes (como la Uña de Gato y la Corona de Rey), entonces tienes una formula anti enemigos perfecta.
Normalmente el Eléboro se encuentra en las floristerías por Navidad -que es cuando florece-. En casa lo traemos todos los años porque es un magnífico defensor del hogar. Cuando me enteré de que en la floristería del barrio vendían Eléboros, llamé enseguida al dueño para encargárselos.
-Buenos días, me he enterado de que tienen Eléboros Blancos. Quería encargarlos.
-Sí, han llegado esta semana, ¿Cuántos quiere?
-Todos..!. Resérvemelos que pasaré estar tarde a recogerlos, gracias.
¿Te imaginas la cara del dueño?
¿Para qué diablos querrá tantos Eléboros?¿Para hacer brujerías?
-Caliente, caliente, pero no del todo..!
El Eléboro es un gran aliado de magos y brujas. Yo los pongo en el balcón del comedor. Cuando los ves desde fuera parecen plantas ornamentales, pero en realidad son mágicas. Cuando se pasa la temporada los recojo para preparar mis productos. Obviamente no los incluso en jabones ni baños porque son tóxicos, pero sí los incluyo en polvos, velas, vinagres y conjuros.
Ahora que sabes cómo conectar con el ánima de las plantas es el momento de probar.
Empieza por las plantas que ya tienes, más uses o más quieras. No olvides tu especia favorita, -ésa que tanto usas para cocinar- y las que prepararas para beber en tus infusiones. Concédete el tiempo necesario para experimentar y conocerlas. Tal vez te sorprenda la información que te ofrecen.
Sabio y Bendito Seas
El Brujo Shiva