38. LA BENDICIÓN DE LOS ALIMENTOS
La Gratitud a la Tierra
Tiempo adecuado: antes de comer
Elementos Necesarios: Gratitud y Amor
Otra forma de trabajar con la Tierra y conectar con ella consiste en bendecir los alimentos. Bendecir lo que comemos es una forma de agradecer la generosidad de la Tierra. Es reconocer que todo sale de “su cuerpo” y afirmarlo a través de la palabra.
Para bendecir los alimentos puedes usar las palabras que te salgan de tu boca antes de comer, o memorizar una oración que te guste. Cuando digo “comer”, me estoy refiriendo a las principales comidas del día (desayuno, almuerzo, comida, merienda y cena). Existen muchas oraciones positivas que puedes usar para bendecir los alimentos. Si buscas por Internet encontrarás de todo tipo de oraciones pertenecientes a distintas corrientes y religiones. Algunas son muy sencillas y fáciles de recordar. Otras son más elaboradas.
Si piensas que bendecir los alimentos te suena demasiado a “religión”, déjame decirte que todas las religiones bendicen los alimentos como formas de agradecimiento. De hecho es algo que ya practicaban los antiguos paganos de toda Europa.
Algunas de las oraciones que he utilizado para bendecir los alimentos son:
Te doy las gracias oh Gran Madre
Por estos alimentos procedentes de tu cuerpo
Que sean portadores de Salud, Paz, Alegría y Bendición
Que así sea
Otra que he probado con éxito es:
Bendice oh Madre de la Tierra
Estos alimentos procedentes de tu cuerpo
Que la Salud, la Fortaleza y la Alegría
Estén presentes en nuestro clan
Que así sea
Y otra que he probado ante la familia es:
Oh Gran Madre de todos nosotros
Portadora de todo lo fructífero y santo
Bendice estos alimentos en nuestros cuerpos
Y transfórmalos para que se conviertan en Salud, Paz, Amor y Bienestar
Bendice las manos que los han preparado
Y a aquellos que no los obtienen para que los obtengan de tu mano y de la nuestra
Que así sea
Si vives con más gente y no te atreves a bendecir la mesa en voz alta, siempre puedes hacerlo susurrando tu oración. El efecto es el mismo. La cuestión es proyectar tu bendición con amor y gratitud ante la comida.
Gracias Madre Tierra
Por estos alimentos que salen de tu cuerpo
Que la Salud esté siempre con nosotros
Que así sea
Desde la Experiencia: la primera vez que me atreví a bendecir los alimentos en público fue en una reunión familiar. Un día, mientras estábamos sentados a la mesa y dispuestos a empezar, alguien medio en broma dijo:
-¿Nadie va a bendecir la mesa?-.
En esa reunión habíamos personas procedentes de varias creencias. En ese momento yo estaba trabajando con este programa de empoderamiento. Y como nadie se atrevió a decir nada dije:
-Yo mismo lo haré-. Tomaos todos de las manos para formar el círculo.
-¿En serio?- dijo alguien.
-Sí, en serio. Si lo hacemos, lo hacemos bien. Cuando nos tomamos de las manos alrededor de una mesa, estamos afirmando que todos estamos unidos. Este gesto aleja la negatividad y atrae las bendiciones divinas. La bendición de los alimentos genera energía positiva. Une a las personas y permite que el amor por la familia se exprese.
Al decir esto todos acordaron hacerlo. A los niños les encanta participar en este tipo de experiencias, porque sienten que la familia se unifica.
Entre bromas todos nos tomamos de las manos y algunos esperaron a ver qué oración utilizaba. Cuando formamos el círculo cerré los ojos por un momento y exclamé mi bendición. Cuando terminé, abrí los ojos y miré a los demás. Todos estaban atónitos al ver que invocaba a la Madre Tierra. Los cristianos se quedaron sin voz. Los ateos me miraban extrañados al ver un círculo de personas cogidas de la mano. Sin embargo, dije tan campante mi oración para que la Tierra bendijera los alimentos y todos estuviéramos sanos y felices. Una vez terminada la oración, exclamé:
-Ya podéis soltaros las manos y disfrutar de la comida. La Madre Tierra está con nosotros-
Aunque la bendición pasó inadvertida para la mayoría de los hombres, en el momento en que nombré a la Madre Tierra, todas las mujeres de la familia giraron la cabeza y prestaron atención. A todo el mundo le gusta la Madre Tierra. Es un concepto vinculado inherentemente con las mujeres, las madres y la familia. La mayoría de las veces es aceptado por la gente y no resulta amenazante para ningún sistema de creencias.
Cuando bendices los alimentos que tomas, estás recordando que todo sale de la Tierra. El trigo, el pan, el arroz, el maíz, las frutas, las verduras, las especias y todo lo que comemos, sale de ella. Nombrar a la Madre Tierra en la bendición de los alimentos es lo más natural, justo, coherente y sano que podemos hacer.
Consejo: Si nunca antes has bendecido los alimentos en presencia de otros, sé prudente. Hay que tener mucha seguridad en uno mismo, y un ego equilibrado para que la bendición salga bien. Para que la bendición tenga éxito, has de pronunciarla tomando consciencia de la Tierra y proyectar tu amor hacia todos los que están en la mesa.
Sabio y Bendito Seas
El Brujo Shiva
