23. PROGRAMA DE ENTRENAMIENTO ELEMENTAL
Las Técnicas de tu Empoderamiento Mágico
Cuando decidimos ser magos solemos pensar que para serlo necesitaremos descubrir las fórmulas secretas del poder. Esto en principio es cierto. Aunque una parte del misterio consiste en entender el propio poder.
Las escuelas mágicas de occidente, nos han dicho que para formarnos como magos necesitamos dominar a los Cuatro Elementos. Y sólo cuando lo logremos podremos ser dignos de llamarnos a nosotros mismos “magos”.
“Dominar” no es la palabra exacta que usaremos aquí, porque dominación, indica “subyugación”, “privación de libertad” o “estar por encima de…”. Nosotros -comprendiendo que la Naturaleza es sagrada-, no queremos dominar a los elementos como si estuviéramos en un circo. Queremos acercarnos a ellos desde un estado de paz, entender sus misterios y alinearnos a su energía para usarlas sin dañar a nadie.
En la vida diaria podemos observar distintos tipos de poder. El poder exterior es uno de ellos. Este poder es la capacidad de dominar algo sin tener en cuenta lo que dominamos. Es el poder que todos conocemos en esta sociedad jerarquizada. Es el que vemos en la escuela cuando los jóvenes sufren acoso. Lo vemos en el ámbito laboral cuando un jefe explota a sus empleados, y lo sentimos cuando vivimos una situación de impotencia. Este tipo de poder nos hace imponer la voluntad a la fuerza o sufrirla. Nos hace sentir la energía externa de la subyugación aplicada sobre otros. Es el poder que viene desde fuera y se utiliza para dominar el mundo físico.
Otro tipo de poder es el “poder interior”, que es el que usamos los magos y las brujas. Este poder es mucho más sutil, aunque también más efectivo y duradero. Cuando el poder interior se activa, puede producir los cambios externos que deseamos. Este tipo de poder se puede entender como el mecanismo interno de la vida. Si tienes poder sobre un programa político, puedes cambiarlo desde dentro. Si tienes poder sobre la dirección de una empresa, puedes cambiar su rumbo. Si tienes poder sobre un elemento desde dentro, puedes usarlo a tu favor.
Para que podamos ser magos y brujas necesitamos aprender a conectarnos con los elementos desde dentro. Pues es sólo desde dentro que podremos comprenderlos y usarlos. Para hacerlo vamos empezar un programa de entrenamiento que nos permita conectarnos a ellos y usar sus fuerzas físicas y no físicas.
Entender el mecanismo interior de los elementos es necesario para nuestra formación. Cuando observamos los elementos naturales, nos damos cuenta de que sus fuerzas son mucho más poderosas que nosotros. Una tormenta es un fenómeno natural mucho más poderoso que el ser humano. Si queremos usar el poder mágico de la tormenta para lograr un objetivo, en lugar de intentar dominarla como a un león, necesitamos sentirla en nuestro interior en primer lugar, abrirnos a su poder desde el corazón y fusionarnos a ella. Ya que si lo hacemos de esta forma, podremos ser parte de la tormenta y sólo entonces usar su poder.
Así pues, la mejor forma de empezar un entrenamiento mágico, consiste en acercarte a la Naturaleza con buenas intenciones. Esto es desde un estado de paz y confianza. Cuando los elementos te conocen y comprenden que no eres una amenaza para la vida, entonces ellos están dispuestos a trabajar contigo y te otorgan sus dones.
“El Ejercicio de Enraizamiento” es el primer paso de este programa. Tiene como objetivo llevar tu estado interno a la armonía natural. Es una forma de calmarte a ti mismo y conectarte a la Naturaleza intrínseca. Cuando lo practicas de forma diaria, estás potenciando tu conexión con las fuerzas naturales desde tu interior. Estableces una conexión sagrada y esto te permite acercarte a las bendiciones del Gran Espíritu.
Con los cuatro elementos debemos proceder de la misma manera. Si queremos usar el fuego para provocar cambios en nuestras vidas, necesitamos aprender a conectarnos a su poder desde dentro, fusionarnos con su energía, y sentirnos fuego. Para esto no hace falta “quemarse”. Lo que hace falta es conectar con su energía desde el interior. Y una vez lo logramos (a través de los ejercicios), el fuego forma parte de nuestra consciencia y podemos usarlo.
Con el Espíritu sucede lo mismo. Si quieres acercarte a él para recibir sus bendiciones, necesitas calmar tu estado interno y dar un salto de fe. Necesitas elevar tu vibración. El Espíritu como “Alma de la Naturaleza” que es, sabe muy bien quién eres y cual es tu situación actual. Conoce todas tus tendencias, virtudes y defectos. Sabe lo que quieres realmente y cual es tu estado actual de evolución. Para acercarte a él, necesitas despojarte de cualquier máscara de apariencia o egoísmo.
Al igual que un jefe de empresa, el Espíritu prefiere la sinceridad. Necesita ver que estas preparado para manejar el poder invisible. Si no lo estas, sencillamente te ignora, y el don que podría concederte no llega. No puedes llamar a la puerta del Espíritu y exigir su presencia para que te conceda un ascenso. Porque si lo haces así -él, que es muy sabio-, no te escuchará. Esto que parece gracioso, en realidad no lo es cuando eres un aprendiz ansioso.
¿Te parece muy difícil llegar a este nivel?
¿Crees que tú no puedes conectar con el Espíritu?
Conozco a muchas personas que se iniciaron en el mundo mágico sin ninguna capacidad sobrenatural, y gracias a su fe y trabajo constante, se han convertido en grandes brujas. Esto demuestra que la sinceridad, la humildad y la dedicación funcionan. Cuando aprendes a conectar con la Naturaleza desde la paz y eleves tu frecuencia interior, el Espíritu se acerca a ti.
Al Espíritu le encanta encontrar personas predispuestas a dar un paso más en su evolución y concedernos sus dones. Estos dones son las maravillas del reino invisible y sirven para que la humanidad evolucione. Cuando el Espíritu derrama sus dones sobre ti, tu consciencia despierta de algún modo. A veces se traduce en dones curativos, videncia, mediumnidad, percepción o talentos que se despiertan desde tu interior. Sus dones pueden ser de lo más misteriosos, pero cuando llegan, tu vida mejora.
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EL “YO LÓGICO” Y “EL YO SABIO”
En las páginas anteriores hemos dicho que la magia es el arte de producir cambios en nuestra consciencia de acuerdo con la voluntad (Dion Fortune). Cuando practicamos rituales, meditamos, invocamos, cantamos, encendemos velas y rezamos, estamos cambiando intencionadamente nuestro estado de consciencia.
¿Pero por qué queremos cambiar nuestro estado de consciencia?
En nuestra vida diaria, la mayoría de nosotros, usamos casi siempre un determinado tipo de consciencia. Cuando vamos a trabajar, conducimos, contestamos al teléfono, razonamos y hablamos, estamos usando un tipo de consciencia que es conocido como el “Yo Lógico”. Este estado mental, es el que usamos habitualmente para vivir. Cuando nos vamos a dormir el “Yo Lógico” también se duerme, y otro estado de consciencia se activa en nuestra mente: el “Yo Sabio”.
El “Yo Sabio” es el estado de consciencia mágico y se expresa a través de símbolos, sensaciones, percepciones e intuiciones. Es el que te dice que “esa persona no es el amor de tu vida” o que“ese trabajo en realidad no te hace feliz”.
Todos nosotros podemos acceder a este estado de consciencia y usarlo en nuestras vidas. Los artistas, genios, músicos y místicos de todos los tiempos, cuentan que sus impulsos creativos provienen de algún lugar recóndito de su mente (que no es lógico ni racional). Y sin embargo, acceder a este estado es totalmente necesario para que puedan estar inspirados, diseñar y crear.
Los videntes, médiums y chamanes, acceden a la información a través de su “Yo Sabio” - que por naturaleza lo tienen más desarrollado-, y cuando usan esta parte de su consciencia, acceden a los planos superiores, conectan con los espíritus y se traen información.
Los magos y las brujas modernos sabemos que todos podemos llegar a estos estados de consciencia, a través del entrenamiento. Por eso decimos que la magia es el arte de cambiar nuestra consciencia a voluntad.
Mediante las técnicas y los rituales que practicamos, podemos acallar por un momento a nuestro “Yo Lógico”, y dejar que el “Yo Sabio” se comunique. El “Yo Sabio” es ésa parte de nuestro ser que está conectada directamente con el Espíritu, y es el medio por el que todas las genialidades se manifiestan en nosotros.
Aunque nuestro “Yo Lógico” piensa que la magia puede ser sólo una teoría, para nuestro “Yo Sabio” es tan real como las facturas que pagamos en el banco. Cuando practicamos rituales, nuestro “Yo Sabio” se estimula y activa. Se siente atraído por estas prácticas tan sensuales y se motiva a despertar. Ante estas prácticas el “Yo Lógico” deja de ser el protagonista. Queda silenciado por un momento y deja paso al “Yo Sabio” para que entre en acción.
Cuando practicamos un programa de empoderamiento mágico, estamos dejando que nuestro “Yo Sabio” sea el protagonista de la historia. Para hacerlo, usamos rituales naturales que estimulan nuestra consciencia y permiten que la conexión con el Espíritu se produzca de forma consciente.
Nota: Si estás preocupado por dejar que tu “Yo Sabio” se exprese, no tengas miedo. Todos tenemos un mecanismo natural para que nuestro “Yo Lógico” no nos abandone del todo. La clave está en saber que tu “Yo Sabio” existe, y permitir que se exprese a través de una actitud sincera, positiva y abierta.
EL PROGRAMA DE ENTRENAMIENTO TE DA PODER
A continuación vamos a abordar el programa de entrenamiento para establecer una conexión directa con los elementos. Este programa está diseñado para que puedas practicarlo por ti mismo –sin ayuda de nadie-. Te ayudará a conectar con los elementos de forma individual, y hará que tu mente-consciencia conecte con el poder subyacente que existe más allá de nuestra realidad física.
El programa que vamos a seguir es el mismo que han practicado muchísimas personas para convertirse en brujas. Está formado por ejercicios y técnicas que deberás hacer para completar tu formación.
Además de ayudarte a corregir los desfases energéticos que puedas tener, también te servirá como entrenamiento mágico y te permitirá expandir la consciencia. Su estructura comienza por la Tierra –que es el elemento más denso- y acaba con el Espíritu –que es el más sutil-. Cuando lo termines íntegramente, habrás recogido toda la maestría elemental y tendrás en tu interior la conexión a los elementos y al propio Espíritu.
Cuando practiqué por primera este programa, me di cuenta enseguida de que efectivamente los ejercicios movían energías. Además de ayudarme a relajarme y a conectar con la Naturaleza desde dentro, cada ejercicio activaba algo extraño en mi interior que me hacía ver la Naturaleza como el templo del Espíritu.
Ahora la Naturaleza era algo más que piedra y tierra. Era un templo sagrado lleno de energías, seres elementales y fuerzas mágicas. Al recorrerlo íntegramente, mi mente se abrió y pude conectar con la presencia del Espíritu. Tiempo después, cuando empecé a dar clases online, comprobé que estos fenómenos también se producían en los alumnos sinceros y afanados, y me demostró que el programa funciona.
Al compartir esta enseñanza a través de mis clases, observé varios detalles importantes.
En primer lugar me di cuenta de que la mayoría de los aprendices no querían escuchar nada acerca del poder interior. En lugar de buscar su transformación interna, buscaban el poder sobre los elementos de forma ansiosa. Esto me hizo reflexionar, aunque no podía hacer mucho más que aconsejar y enseñar que la conexión interna es la clave.
Si eres un aprendiz ansioso, me gustaría decirte algo. En lugar de buscar el poder porque sí, tu intención debería centrarse en conectar con el reino invisible para que tu consciencia se expanda y puedas mejorar tu capacidad sensitiva. Si lo haces desde este enfoque –con humildad y bondad-, elevarás tu energía positiva y el poder llegará a ti de forma natural y abundante.
He comprobado que los elementos actúan como portales dimensionales en nuestra consciencia, y por ellos accedemos a las energías invisibles. Estas energías moran más allá del elemento físico que estemos usando, porque están más allá de esta dimensión. Cuando conectas con los planos superiores desde tu interior, te das cuenta de que todo es real. Y puedes usar estas energías en tu vida. No es que antes no existieran y ahora sí. La cuestión es que ahora has podido percibirlas y sabes de su existencia.
El programa de empoderamiento elemental hace esto. Te abre a otras dimensiones, te eleva para que puedas percibir las energías, y te enseña a usarlas. Si descubres que el programa funciona mejor de lo que esperabas, no te sorprendas. Mantén el equilibrio y acéptalo como tal. Tampoco vaya a darte un ataque al corazón si en el transcurso de los ejercicios comienzas a percibir “cosas raras”. Esto es la prueba de que tus sentidos psíquicos están despertando. Sentir esto es más común de lo que parece, y si te ocurre, significa que lo estás haciendo muy bien.
A menudo los aprendices cuentan que el programa de empoderamiento “despierta algo extraño en ellos”. De repente y sin saber porqué, tienen más intuición, saben lo que va a ocurrir, tienen sueños más vívidos y proféticos, descubren que sus percepciones son más nítidas, o sienten las energías vitales por primera vez.
En este punto algunos estudiantes se asustan y abandonan el programa porque sienten que no lo controlan. Otros en cambio lo ven como las maravillas del Espíritu. Si eres un alumno curioso pero escéptico, y descubres que “todo es verdad”, tal vez necesites tiempo para digerir tu nueva capacidad.
Como es natural, cada alumno evolucionará de manera diferente y cada cual aceptará las realidades ocultas de forma distinta. Si no sabes muy bien cómo reaccionar ante tu nueva experiencia, mantén la calma y recuerda que el equilibrio es la base de tu desarrollo.
EL RETO DE LAS BRUJAS
Tu compromiso de recorrer el sendero
Otra cosa que aprendí a través de la enseñanza, es que todo el mundo quiere aprender la magia para mejorar su vida. Pero sólo el 5% de los que dicen querer aprender dicen la verdad. El resto mienten. No es que me mientan a mí. Se mienten así mismos pensando que la maestría la adquirirán en dos días. Esto ocurre porque estamos acostumbrados al resultado instantáneo. La cultura del “lo quiero ya” también ha llegado a la magia y como puedes imaginarte, el camino real requiere más tiempo y dedicación.
Suscribirse a un curso online, comprar un libro de sabiduría o magia, no te garantiza que tú también la tengas. Un curso sólo es un curso. Un libro sólo es un libro. No sirven de nada si no aplicas lo que cuenta. Pagar más dinero tampoco te da la experiencia vital de recorrer el sendero por ti mismo. Lo digo porque estamos acostumbrados a comprar objetos físicos o servicios pensando que si lo hemos pagado ya tendremos sabiduría. Qué error…!
Por último, pero igual de importante, aprendí que sólo el 5% de los alumnos estaban realmente comprometidos con su formación. Y ése compromiso personal era el que les permitía empezar el programa y acabarlo.
Con esto quiero decirte, que en el camino te asaltarán tentaciones, ideas confusas del tipo “este ejercicio me lo salto” o del tipo “este ejercicio ya me lo sé”. Sólo los alumnos verdaderamente comprometidos y deseosos de transformar sus vidas, harán todos los ejercicios. Sólo los comprometidos empezarán y acabarán el programa.
Si eres de los que se entusiasman ante los nuevos retos, trata de observarte a ti mismo y aprende a ser constante. Es fácil empezar y caer a la mitad también.
Fíjate que el 95% de los alumnos fracasan.
¿Por qué ibas a ser tú uno del 5%?
¿Tan comprometido te crees?
¿Estás seguro de que podrás llegar al final?
Si estas pensando que estoy retándote para que lo hagas, estás en lo cierto. A veces necesitamos el estímulo de un reto para ponernos en marcha. No se tú, pero cuando mi maestra me retaba a realizar un trabajo de entrenamiento, su desafío funcionaba en mí. Como era muy sabia, sabía que la mejor técnica para retarme era la intimidación. Su frase para que terminara mi entrenamiento era: “Si no lo haces, jamás serán un verdadero mago, si no lo haces, serás un mierda…!”
Y funcionaba..! Que alguien te rete de ésa forma sólo te conduce a la solución o al abandono total. Y afortunadamente puedo decir que lo cumplí.
Una vez leí en el libro de Donald Michael Kraig –El Gran Libro de los Rituales Mágicos- (Ediciones Martínez Roca) una frase que decía:
Nadie puede otorgarle poderes mágicos. Usted debe ganárselos.
Sólo hay un modo de conseguirlo: practique, practique, practique…!
Al completar mi entrenamiento comprendí la verdad de esta frase. Si te dicen que necesitas practicar lo entiendes, pero sólo de forma superficial. Cuando has practicado todo el programa por ti mismo y vuelves a leer esta frase, puedes decir que la frase también es tuya.
Piensa en este programa como un plan de inversión a largo plazo. Lo que hagas ahora lo cosecharás más tarde. Pero si no lo haces, no lo cosecharás nunca.
Si de verdad quieres ser un mago o una bruja excelente, debes practicar. En el mundo mágico no existen atajos para lograr la sabiduría. Si alguien te los ofrece, desconfía. Los atajos suelen ser engañosos y tomarlos es saltarse pasos que pueden ser esenciales en tu formación.
Para que tu entrenamiento elemental funcione debes seguir todos los ejercicios. Hazlos uno a uno hasta completarlos. Procura ser disciplinado contigo mismo. Hacer todos los ejercicios hoy y olvidarse de ellos el resto del mes, no es lo más mejor para desarrollar una buena conexión.
No hay peor cosa para el desarrollo de un mago, que seguir un entrenamiento irregular. Si empiezas hoy y te quedas a medias, no desarrollarás el vínculo y tu “cobertura” con el Espíritu no funcionará como debe. Será como ésas comunicaciones entrecortadas y odiosas que se producen cuando hablamos por teléfono.
¿Quién quiere hablar con el Espíritu de esa forma?
Si tienes una vida muy ocupada y no puedes dedicarle mucho tiempo al programa, siempre puedes preparar una excursión familiar para que tu contacto con la Naturaleza sea directo. Querer es poder. Hay muchas formas de incluir los ejercicios en tu vida diaria, la cuestión es si quieres hacerlo.
En las antiguas escuelas iniciáticas el candidato a mago debía pasar por una prueba de valor, secreto y confianza. Sólo cuando el maestro aceptaba al candidato, el entrenamiento comenzaba. Y sólo cuando pasaba cada prueba, recibía la siguiente. Lo malo de enseñar a distancia es que no puedo supervisar tus avances, pero tú si que puedes hacerlo.
Si eres comprometido y sincero, tú mismo sabrás si un ejercicio esta bien hecho o no.
Puede que pienses que soy muy exigente, pero el camino de la transformación es así. Si no eres capaz de conectar con los elementos y sus energías básicas, ¿cómo vas a conectar con las fuerzas superiores? El razonamiento es obvio. Empezar un programa elemental y acabarlo, es conveniente para que tu consciencia se expanda y tu magia funcione.
Me gusta recordar que la característica esencial de este programa es la conexión a través de la consciencia. Sin conexión no hay poder. Y lo bueno de este programa es que cuanto más lo practicas más vibraciones positivas generas.
¿Preparado?
Vamos a ello.
Sabio y Bendito Seas
El Brujo Shiva
EL RETO DE LAS BRUJAS.
. ABRIR TU CONEXIÓN PERSONAL.
EL "YO LÓGICO" Y EL "YO SABIO"
