67. EL PLANO MENTAL (VII)

67.EL PLANO MENTAL (VII)

SANAR UN PROGRAMA HEREDADO DE UNA PERSONA VIVA

Te diré, que este ritual también puedes practicarlo para sanarte de un programa tóxico de una persona viva. Si descubres que tu madre tiene un conflicto en su inconsciente que tú has heredado y te está afectando, practica el ritual con la misma intención. El ritual activa en tu mente la sanación que desbloquea ésa sombra, liberándote de ella. De modo que puedes practicarlo tanto para liberarte de programas ancestrales, como de personas vivas.

Te pondré un ejemplo directo: mi padre se crió durante la posguerra y vivió el tiempo de escasez. Cuando superó la crisis, pudo hacer fortuna a través del negocio de la hostelería. Tiempo después, nosotros emprendimos un negocio de hostelería. Cuando yo -como hijo-, puse en marcha mi negocio de hostelería, tenía a mis empleados y cocineros trabajando, pero sin saber porqué, empecé a trabajar en la cocina. El instinto de cocinar se apoderó de mí y empecé a cocinar. Además de liderar el negocio, sentía un deseo irresistible de cocinar. Cuando me di cuenta de esto, analicé a mis ancestros y comprendí que “mi deseo de cocinar- dar alimentos”, en realidad, no era mío, sino de mis ancestros. De modo que me pregunte:

¿A quién estoy dando de comer?

¿A mis clientes o a mis ancestros?

Efectivamente mi inconsciente sintió la necesidad de saciar el hambre de mis ancestros. Cuando me di cuenta de ello, hice un trabajo de sanación ancestral reconociendo el sufrimiento que pasaron mis ancestros honrándoles. Para hacerlo hice el mismo ritual. Escribí la carta liberadora a mis ancestros, la puse en mi altar y presenté una ofrenda de alimentos. Encendí unas velas de gratitud, hablé con ellos agradeciéndoles su esfuerzo, pero informándoles de que ya no era necesario buscar comida. La guerra había terminado hacía mucho, la comida abundaba y todo iba bien. No era necesario trabajar en un sector alimentario porque ya no hacía falta. Fue hacer esto y sentir que algo en mi interior se liberó.

El hecho de reconocer conscientemente el sufrimiento de los ancestros, aceptarlo y equilibrarlo con amor, paz y abundancia, liberó la conexión de mi mente. Mi propio inconsciente envío un mensaje a mi inconsciente familiar informando de que “todo iba bien”. De la misma forma que nosotros recibimos la información del inconsciente familiar, también podemos enviar información para dar una noticia y desbloquear un conflicto.

Lo bueno de este sistema es que si un miembro de la familia hace esto, entonces libera a todo el clan de ése bloqueo. Si alguien más hereda ése programa mental, y tú lo liberas, entonces liberas a todo el clan.

Analizando a mi familia, descubrí que a mis hermanos les ocurría lo mismo. Dos de mis hermanos también trabajaban en el sector alimenticio y sin querer habíamos heredado un programa mental de “cocina y no pasarás hambre”. Pero cuando liberé ése programa, los tres pudimos liberarnos de la necesidad de cocinar. Ahora cocino de forma natural, sin ésa necesidad de “alimentar a mis ancestros”. Porque ése programa tóxico ha sido sanado y liberado de toda la familia.

Tu profesión, tus hábitos instintivos y todo lo que haces de manera repetitiva, puede estar motivado por una herencia ancestral inconsciente que desconoces. Da igual si el programa original lo sintió un bisabuelo, tu abuelo o tu madre que está viva. Para el inconsciente familiar, todo es aquí y ahora, de modo que observa tu historia y mira si has recibido algún programa tóxico.

CÓMO DESCUBRIR SI TENGO UN PATRÓN TÓXICO HEREDADO

Tu situación profesional puede revelarlo

Los terapeutas han descubierto que los programas tóxicos heredados, se resumen en dos instintos primarios: el instinto de supervivencia y el instinto de procreación. La supervivencia está relacionada con la salud, la comida, la profesión, el dinero, el territorio, la casa, herencias, bienes, etc. La reproducción está relacionada con la sexualidad, la vida íntima, fertilidad, los hijos, las relaciones, los engaños, los amantes, los abandonos, etc. Y así, cada cosa que hacemos, vivimos, sentimos, sufrimos o rechazamos, se puede relacionar con estos dos instintos que todavía rigen nuestra psique.

La profesión que tenemos, lo que hacemos y nuestros hobbies, también pueden sacar a la luz, una herencia ancestral tóxica. De modo que para descubrir si llevamos encima un programa ancestral negativo, necesitamos analizar nuestra vida laboral.

¿Por qué escogí esta profesión?

¿La he escogido libremente?

¿Fue una elección o una falta de opción?

¿Me gusta lo que hago?

¿Gano dinero?

¿Me implico demasiado sin obtener beneficios?

¿Siento que debo hacer algo por obligación?

¿Mi profesión es totalmente opuesta a lo que sufrieron mis ancestros?

A través de estas preguntas puedes descubrir si estás repitiendo una historia ancestral. Igual que elegimos a nuestras parejas sin darnos cuenta, nuestra profesión también puede estar regida por nuestro inconsciente familiar. Si tu profesión va bien, adelante, indica que no hay ningún programa heredado tóxico sobre ti. Pero si no paras de trabajar y no obtienes beneficios y encima te sientes frustrado, empieza a analizar tu árbol genealógico. Tal vez estés reparando un trauma vivido por tus ancestros -a través de tu profesión-.

“Soy costurera, me dedico a coser, pero no me gusta mi trabajo. No gano dinero, mis telas son de calidad, pero no se venden. Y aun así, siento que necesito coser. Al analizar mi árbol descubrí que la costura está relacionada con “unir personas”, de modo que empecé a investigar la historia de mis ancestros. Descubrí que mi madre tuvo un amor pasado no confesado, pero no acabó bien. Él se marchó con otra mujer y ella se sintió abandonada. Enseguida se casó con mi padre, aunque sin amarlo realmente. Luego supo ser feliz con él, pero el dolor pasó al inconsciente familiar. Nadie en la familia se dedica a la moda, salvo yo misma. Al descubrir la historia, me di cuenta que cuando yo cosía, en realidad estaba uniendo a ésas personas que se separaron, como gesto simbólico de “unión”. Hice el ritual de sanación para que mi inconsciente dejara de actuar bajo el programa de mi madre. Sin decirle nada a ella lo hice, y me sentí liberada. Saber que mamá sufrió eso, me ha hecho mirarla de otra forma, más cercana, más humana (y no tan perfecta). Esa imperfección me acerca a ella, amándola aun más. Sé que nadie es perfecto, y saber que sufrió tanto, me ha impulsado a decirle que sé lo que vivió. Al decírselo se ha sorprendido, pero también se ha sentido liberada y en paz. Su rostro tenso se ha ido cambiando conforme hablaba con ella de mujer a mujer, y me he sentido feliz por ella. Ahora sigo cosiendo, pero valorando mi trabajo. Coso sin obsesión, sabiendo que ya no tengo que unir a nadie. Esto me ha hecho dar un cambio laboral que sí me aporta beneficios. Como me gusta coser, he fortalecido mi autoestima laboral, y he encontrado una empresa que vende vestidos artesanos. Creo que he ganado dos cosas: sanación para mi mamá, y sanación y dinero para mí misma”.

Caso anónimo

2018

Reparar un trauma ancestral significa repetirlo. Esto no es algo bueno ni malo, simplemente es la forma que tiene el inconsciente familiar de equilibrar ésa energía.

Nuestras profesiones a menudo sacan a la luz lo que el inconsciente familiar oculta. Por eso es importante hacerse preguntas acerca de tu trabajo, profesión, hobbies, etc.

Muchas veces el inconsciente familiar nos empuja a escoger una tarea como forma de reparación de algún “deseo no vivido” por parte de los ancestros. Y nos sentimos atraídos hacia ésa profesión. Si el programa heredado es positivo, entonces tendremos éxito y suerte, pero si es negativo y estamos reparando, será una profesión sin éxito –hasta que reparemos la sombra heredada-.

También he visto muchos casos positivos donde la abuela quería ser maestra o enfermera, y al no poder cumplir su deseo, pasó la información al inconsciente de los nietos. Mi madre es un ejemplo de ello. Siempre que escucho hablar a mi madre sobre los médicos y maestros lo hace con gran admiración. Creo que si hubiera podido estudiar habría sido maestra o enfermera, pero no pudo hacerlo. Ahora, ella tiene una nieta maestra y otra enfermera. Las dos nietas están realizando la profesión soñada de la abuela. Inconscientemente sus nietas escogieron una profesión que repara el deseo añorado de la abuela. Afortunadamente las nietas tienen suerte y les va bien, pero resulta curioso ver cómo aquello que no pudo realizar la abuela, lo han sacado las nietas.

Para saber si tu programa profesional es positivo o negativo analiza tu profesión y hazte las preguntas. Si todo va bien, no hay que reparar nada. Pero si algo va mal y no sabes cómo solucionar el problema, mira este listado para saber qué estás reparando en el inconsciente familiar.

ü Costureras, Sastres: reparan separaciones, divorcios, rupturas amorosas, abandonos, amores no realizados: “coso, uno lo que fue separado o no pudo estar unido”.

ü Maestro, Profesor: reparan la educación, la información, niños que no pudieron ir a la escuela: “enseño a los demás lo que alguien no pudo aprender”.

ü Químicos: repara medicinas, alimentos, enfermedades no curadas, muertes extrañas, enfermedades raras, etc. Según el químico que sea, así es la reparación. Por ejemplo: si son químicos para curar, reparo enfermedades o muertes. Si son químicos para matar plagas, curo el efecto relacionado con ése químico.

ü Matemáticos: es el padre, la lógica, el orden, la justicia. Pongo orden y claridad en los números (dinero, asuntos económicos).

ü Cocinero, Panadero, Sector Alimenticio: repara hambres ancestrales, hambrunas, necesidades, carencias básicas. También buscan unir a la familia: “pongo la mesa y vienen todos a comer, entonces están juntos en casa, unidos”.

ü Pastelero, Dulces, Bombones: repara separaciones, divorcios, cortes amorosos: “necesito endulzar la vida de alguien, quitar la amargura del desamor”.

ü Comunicaciones, Periodistas, Locutores Relaciones Públicas: repara secretos, falta de comunicación en alguien de la familia: “”yo hablo por los que no han podido hablar”.

ü Policías, Soldado, Portero, Guardias de Seguridad: ausencia o exceso de autoridad. Repara personas sometidas a la autoritaria o con falta de ella: “busco al padre o al guía que dirija mi vida”.

ü Asistente social, Pediatras: reparo el abandono de los niños por la madre. Protejo a los niños de los peligros, agresiones: “cuido al niño para que esté feliz, tenga una oportunidad en la vida”.

ü Agricultores: reparo dramas de hambrunas, falta de alimentos. Si busco más tierras, entonces busco más seguridad.

ü Banqueros, Cajeros, Agentes de Seguros: repara herencias, ruinas, robos, asuntos de dinero, pérdidas de dinero, estafas cometidas o vividas.

ü Psicólogo: reparo problemas familiares, madres, hijas, asuntos emocionales profundos, pérdidas, necesidad de comprender a las personas, etc.

ü Político, Delegado, Líder Sindical, Senador: no me reconocen dentro de mi familia. “Necesito reconocimiento del clan y demostrar que soy válido.”

ü Estética, Belleza: reparo el sentimiento de “no soy bella”. Repara la autoestima del clan (“Si soy bella, atraigo a los hombres, si soy fea, soy rechazada y me quedo sola”).

ü Electricista: repara algo asociado al padre, luz, consciencia, verdad, mentiras ocultas que no pudieron ser contadas y ahora salen a la luz (electricidad).

ü Carpintero: construir un “hogar cálido”, seguro, amoroso, feliz, seguridad.

ü Soldador de Hierro o metal: asuntos del padre, hermanos, separaciones, discordias entre hermanos, ya sean abuelos o recientes, protección contra ataques externos.

ü Abogado, Juez, Ministerio público, Traductor, Intérpretes: necesidad del padre, de un intermediario, justicia, hacer justicia sobre algo. Traducir; hablar claro.

ü Médico, Enfermera, Terapeuta: busca reparar enfermedades o alejar la muerte. Dependiendo de la especialidad indica una cosa u otra.

ü Conductores, Chófer, Ambulancia, Primeros Auxilios: repara abandonos, muertes en el clan, desapariciones extrañas, pérdidas de hijos o muertes violentas, etc.

ü Músicos, Cantantes, Pintores, Payasos, Animadores: repara la tristeza del clan, busca dar alegría y felicidad. Son los alegres que reparan la tristeza no expresada.

ü Albañiles, Inmobiliaria, Ingenieros, Arquitectos, Decoradores, Pintores de casas: reparan la ausencia del hogar, buscan fortalecer el hogar, las propiedades (buscar pérdidas de casas, expropiaciones, bienes perdidos, etc.).

ü Sacerdotes, Monjas, Misioneros, Catecistas, Voluntarios Sociales, Videntes, Médiums, Brujas, Magos, Astrólogos: reparan los pecados cometidos por el clan, abusos sexuales, violaciones, aberraciones, falta de espiritualidad, etc. También reparan ocultamientos (videntes) y cosas no contadas (astrólogos).

ü Nutricionistas, Veterinarios, Ingeniero de alimentos, Entrenador de perros: repara faltas de amor, nutrición, salud, alimentos, compañía, fidelidad.

ü Personal de Limpieza, Lavandería, Tintorería, Lava platos, Tapiceros, Alfombras: reparan la basura del clan, limpian lo que ensuciaron los ancestros, los engaños, “guarradas”, infidelidades, temas sexuales, amantes, etc.

ü Profesiones Peligrosas en zonas elevadas como Escalador: busca el reconocimiento profesional “no soy visible para papá”, “parece que no exista”.

ü Profesiones bajo el mar, buzos, marineros, agua: repara emociones profundas, la madre, el amor, sentimiento de “en el vientre de mamá estoy bien”.

ü Agente de viajes, azafata, hotelero, personal de cruceros, capitán de barco, piloto de avión: repara asuntos de huidas, escapar del clan: “quise huir de mi familia o de mi matrimonio y no pude”.

ü Hijos que se van al extranjero: reparan lo que mamá no pudo hacer. “No pude escapara de mi realidad, ahora mi hija vive en otro país” (simbolismo, tierra-madre).

ü Profesiones de investigación, descubrir cosas, laboratorios, antropólogos, historiadores, cronistas, detectives, etc: reparan secretos en el clan. Investigan la verdad que no pudo contarse por un ancestro, reparan las mentiras dichas o no dichas.

ü Mecánicos, Técnicos: reparan lo que esta mal. Según la especialidad, eso reparan.

ü Comerciantes: reparan robos o estafas cometidas por los ancestros

Cuando estamos reparando un programa ancestral negativo a través de la profesión, trabajamos pero no ganamos dinero, sobrevivimos. Y eso es una señal de que algo estamos reparando. Es como si lleváramos la carga de nuestros ancestros para equilibrar lo vivido por ellos (o lo no vivido). De modo que el único camino para la liberación consiste en analizarnos.

“Mi familia se ha dedicado a la pastelería. Mis padres y abuelos tuvieron esta pastelería y la heredé yo. Ahora me dedico a mi profesión, me gusta, pero siento que algo no va bien en el inconsciente de mi familia. Creo que hay cosas que mi madre no me cuenta de mi abuela. Yo me dedico a hacer pasteles, pero últimamente no los vendo. Siento la necesidad de hacer pasteles por afición y termino comiéndomelos yo misma. No gano dinero, pero siento la necesidad de hacer esto. Cuando descubrí esta terapia empecé a analizar el significado de las profesiones y descubrí que los pasteles indican algún problema marital. Creo que mis abuelos no se querían y hacían vida en común para guardar las apariencias. Le he preguntado a mi madre, pero no me cuenta nada, creo que es para protegerme. A pesar de su silencio, he hecho mis investigaciones y he descubierto que efectivamente el matrimonio de los abuelos estaba roto desde hacía tiempo. He hecho una meditación para sanarme de ésa herencia tóxica y después de un mes he sentido que ya no necesito “endulzar a mi abuela”. Al hacer la carta liberadora y el ritual de sanación le he puesto un pastel como ofrenda y símbolo de dulzura. Al terminar el ritual me he sentido libre. He comprendido que los pasteles son una forma simbólica de dar amor, cariño, ternura, pero en realidad, suplen el amor verdadero a través del azúcar, lo cual es malo. Ahora he comprendido, y he cambiado el rumbo de mi profesión. Sé que mis pasteles son de calidad, de modo que he mejorado mi técnica y he empezado a venderlos con éxito a través de internet. He dejado de cocinar para mi abuela, y ahora mi vida laboral va muy bien”.

Caso 2016

El Plano Mental no está sujeto al tiempo ni al espacio, porque está por encima de él “controlándolo”. El inconsciente familiar puede verse como si fuera una red de hilos invisibles que nos conectan a los inconscientes ancestrales. Todo el inconsciente está en nosotros, de modo que somos la expresión de lo que ha vivido, experimentado, reído, gozado, llorado, sufrido y anhelado nuestro clan.

“Cuando nacemos, todos sin excepción, recibimos un determinado legado transgeneracional en virtud de los vínculos y lealtades inconscientes que se establecen en ese preciso momento con otros miembros del clan, vivos o muertos. Llevamos la marca del clan desde el principio. Obviamente, en ningún momento se nos ofrece la posibilidad de renunciar o aceptar sólo una parte de esa herencia que condiciona nuestra existencia de forma intangible, pero precisa, para afrontarla de una u otra manera. Ese legado nos lleva a emprender acciones y a experimentar situaciones que a menudo no comprendemos porque ignoramos que obedecen a algo oculto y profundo que nos condiciones”.

Secretos y Claves del Árbol Genealógico. Descodificación Bio-Trasnsgeneracional

Jesús Casla- Ediciones Natural 2017.

Algunas personas tratan de escapar de su inconsciente familiar huyendo, marchándose a otro país o no queriendo saber nada del clan. Esto lo hacen porque les parece que su familia representa un peligro para su libertad. Pero huir no arregla nada. Donde quiera que estés, el inconsciente familiar te va a acompañar. Donde quiera que vayas, la información está contigo, a no ser que tomes consciencia de ello, la aceptes y entonces podrás liberarte y vivir la vida que tú quieres.

TU INTERIOR TE AYUDA A LIBERARTE

En muchas familias vemos que las historias sentimentales se repiten sin saber porqué. Y lo que se repite, puede ser nocivo o sanador. Si eres la viva imagen de tu abuela y tu vida va bien, entonces no te interesa librarte de ése programa -porque es positivo-. Pero si te amarga la vida, entonces debes liberarte de ésa herencia mental.

¿Por qué repetimos programas?

El inconsciente familiar busca repetir historias por muchos motivos. Puede hacerlo para reparar algo, o para asegurarse de que el clan sobreviva. Para nuestro inconsciente familiar, es mucho más seguro sobreviviral peligro estando en grupo, que hacerlo en solitario. Los seres humanos somos criaturas sociales y esa idea todavía nos domina.

En muchas familias vemos que el abuelo fue exitoso y montó empresas haciendo fortuna. Luego los hijos fueron educados para seguir la misma línea familiar, pero uno de ellos se rebela contra el clan y decide no seguir la tradición. Aquí, el nieto rebelde es visto como el “traidor del clan”, y puede sentir el rechazo del resto. Aunque gane mucho dinero con ése negocio, su interior se sentirá incompleto, porque en esencia, no está siendo fiel a su propia conciencia. Si el nieto no es fiel a su propia consciencia, puede que lleve el negocio por mal camino, no sepa dirigirlo o simplemente lo arruine. Y aquí, el problema está en que ése nieto no está siendo fiel a sí mismo y sí al inconsciente familiar -sin darse cuenta-.

Cuando un miembro de la familia se libera de ésa herencia y “rompe el molde”, a menudo es rechazado por el clan familiar porque éste siente que ha sido traicionado. Las “ovejas negras” de la familia, las personas que escogen otra profesión a la esperada por la trayectoria de los padres, o cualquier otra variación del supuesto destino familiar, causa un impacto en el inconsciente familiar. Esto hace que todo el inconsciente mire con malos ojos al miembro que se rebela contra el clan. Sin embargo, ése miembro rebelde, en realidad es el liberadorde la sombra del clan.

Esperar que tu hijo sea como tú o que continúe la tradición que a ti te parece correcta, es la peor maldición que le puedes echar a un hijo. Aunque pienses que es por su bien, si no tienes en cuenta su actitud, naturaleza, emociones y deseos, estas condenando su propia felicidad. Nadie en este mundo tiene derecho a recibir una herencia mental tóxica si no la quiere, y lo bueno es que tú puedes liberarte de ella –cuando te das cuenta-.

Si eres padre y acabas de darte cuenta que estás proyectando sobre tu hijo tus sombras, sueño o ilusiones no cumplidas, para un momento y analízate.

¿Te gustaría que tu padre proyectara sobre ti su inconsciente?

¿A que no?

Pues deja de hacerlo. Proyectar sobre los hijos nuestros sueños fracasados -o exitosos- es egoísmo. Una cosa es educar desde la libertad para que tus hijos estén bien preparados y puedan escoger la profesión y vida que ellos quieran, y otra muy distinta programarlos para que continúen la saga familiar.

Muchos padres piensan que sus hijos serán los salvadores de sus fracasos. Y otros desean que los hijos repitan la historia maldita.

“He venido a verte brujito porque mi relación amorosa va mal. Ya no amo a mi novio y quiero cortar la relación. He contado mi decisión a mi madre y ella me anima a que siga con él. Me dice que tenga paciencia, que aguante y siga con él. ¿Qué puedo hacer? No tengo el apoyo de mi madre y me siento muy mal”.

Esto fue lo que me contó una chica cuando vino la consulta acompañada por su madre. Viendo su relación a través de distintos oráculos, descubrí que efectivamente la relación estaba rota. Pero al ver a la madre, también vi lo mismo. Descubrí que la madre estaba viviendo una relación rota que mantenía por interés y cobardía. La madre era infeliz con su marido, pero su egoísmo le hacía mantenerse unida a él, por interés económico. Interiormente la madre esperaba a que el marido se muriese para ser libre por fin, pero el marido no tenía la más mínima intención de morirse.

En este caso tenemos dos historias distintas dramáticas que se repiten. La historia de la madre es terrible, pero la única responsable es ella misma. Ella ha decidido seguir con su marido por interés. Y porque no tiene coraje para enfrentarse a él y separarse. Y ahora la niña vive lo mismo y su madre la aconseja mal.

-¿Cómo puedes aconsejarle eso a tu hija?

Cuando traté este caso, me quedé bastante sorprendido. Buscando una solución positiva, me di cuenta que el problema era la madre. Enseguida hablé con ella y le dije cual era el problema. Se quedó bastante sorprendida porque nadie se había atrevido a decirle la verdad a la cara.

Si eres vidente y atiendes a la gente, tú debes ser muy sincero y no callarte nada de lo que ves. No puedes traicionar tu videncia y debes decirlo todo. De forma educada, con tacto, pero decirlo.

-No hagas caso a tu madre y decide por ti misma tu vida. Ella no tiene el valor necesario ni lo va a tener jamás para hacerlo. Tú sí. No dejes que te engatuse y toma las riendas de tu vida. Tu vida es tuya, no de tu madre. Si le haces caso a tu madre serás muy desgraciada ¿Quieres eso?

-Claro que no…! Quiero ser feliz, separarme, pero mi madre no me apoya.

-Tienes otro problema. Estás esperando a que tu madre te apoye. No busque su apoyo. Apóyate en ti misma. Aprende a ser autosuficiente emocionalmente. No seas cobarde como tu madre y ten el valor de hablar con tu novio. No busques que sea otro el que corte con tu novio. Debes hacerlo tú…!

En este caso vemos dos problemas importantes que se repiten. Las dos mujeres (madre e hija) necesitan el apoyo de alguien para toma una decisión, pero no se dan cuenta que ésa decisión tan personal, deben tomarlas ellas mismas.

A menudo pensamos que los demás deben solucionarnos la vida, pero la realidad es que las cosas más cruciales dependen de nosotros. Ningún mago, vidente, terapeuta, etc va a tomar una decisión por ti.

Tu vida es tuya, y si quieres cambiarla debes aprender a escuchar tu interior, y atreverte a coger el toro por los cuernos. Y una vez más, la terapia sanadora no busca culpar a nadie. Busca hacerte consciente y responsable de tu vida, alumbrar tus sombras y sanarlas para que no te dominen.

Resumen: analizar nuestras creencias limitantes, nuestro inconsciente personal, el inconsciente familiar, relaciones, profesión, hábitos, etc, nos ayuda a tomar consciencia de nuestra realidad. Si quieres cambiar tu vida, empieza por observar tu interior. Cualquier terapia psicológica busca la comprensión del ser para transformarla. Quién toma consciencia de sí mismo, gana libertad y se adueña de su propia vida. Pero quien evade esta responsabilidad, queda expuesto a la sombra de lo que no quiere ver. Si quieres ser una bruja poderosa, permítete el lujo de vivir de forma coherente a lo que sientes. Así podrás construir la vida que realmente quieres.

Sabio y Bendito Seas

El Brujo Shiva

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Bibliografía recomendada:

“Ay mis Ancestros”. Anne Ancelin Schutzenberger. Editorial Aguilar.

“Secretos y Claves del Árbol Genealógico. Descodificación Bio-Transgerenacional”, Jesús Casla. Natural Ediciones. 2017.

“Secretos de Familia”, John Bradshaw. Ediciones Obelisco. 2000.

“Psicogenealogía, Cómo transformar la herencia psicológica”. Doris y Lise Langlois. Ediciones Obelisco. 2010.

“Sanar las Heridas Familiares, Libérate de tu pasado transgenealógico”. Gabrielle Ricq-Chappuis. Ediciones Obelisco.2011.

“Cómo Pagamos los errores de nuestros antepasados. Una introducción a la psicogenealogía”. Ediciones Obelisco. Nina Canault. 2009.

“Mis antepasados de me duelen, psicogenalogía y constelaciones familiares”. Patrice Van Eersel, Catherine Maillard. Ediciones Obelisco.2004.